viernes, 26 de diciembre de 2008

De Regreso


Después de muchas semanas de ausencia involuntaria, estoy de regreso. Hay muchas lecturas que comentar y mucha música también para compartir. Voy a re-empezar por un clásico que hasta ahora tuve la oportunidad de leer: Ray Bradbury. Me lo recomendó una amiga en el mismo instante en que le comenté que me gusta la literatura fantástica. Al decirle que no lo conocía ni de nombre -así era-, ella se sorprendió un tanto (imagino que como cuando uno dice ser fan del futbol y no sabe quién diablos es Platini, Zico, Kempes... o la Chana Fernàndez). Se remangó las mangas de la blusa, se ajustó los lentes, sirvió una cerveza (para mi) un ron en las rocas (para ella)y alistó dos cigarros. No era para menos, después de tres o cuatro "combos" similares, entendí, saliendo de mi aletargada ignorancia, por qué era indispensable leer a Bradbury, sobre todo si uno andaba por allí diciéndole a medio mundo que le gustaba la literatura fantástica. Como no era su intención ni mi complejo el sentirme mal por no saber, agradecí mucho la tertulia y me hice del libro que más me había llamado la atención según ella me los había comentado. Así fue como llegué a "The Illustrated Man" (1951).

lunes, 15 de septiembre de 2008

Las 10 miradas que el cine da al vampiro

Me he atrevido, de una manera por demás escuetísima y muy superficial, a identificar ciertas categorías en el cine de vampiros:

1. Una primera, la clásica, es la que no tenía otro motivo más que el terror. Provocar que el gran público se levantase de su butaca con el pulso tembloroso y la mirada nerviosa, esta gente caminaba con pasos cortos pero muy veloces de regreso a casa. Este cine era el más apegado a su predecesora, la literatura, del siglo XIX. Aquí la imagen y la historia se centraban en lo sobrenatural del monstruo, en su magia, en la impresión terrorífica que mostraba. Es de mencionar la obra clásica del género: "Nosferatu" de Friedrich Wilhelm Murnau, 1922; que abre paso al largo camino que recorrerían los vampiros en el celuloide. También es imperioso nombrar a "Drácula" de 1931 con el extraordinario Bela Lugosi. A Drácula y al vampiro del Siglo XX, lo inventó Lugosi y de allí mi segunda categoría.

2. Aquí, el vampiro pasa de ser el monstruo feo y deformado de Nosferatu, al aristócrata seductor y manipulador vestido con frac y capa de seda negra. En esta categoría entran el resto de obras de Lugosi y por supuesto, las de Christopher Lee que si bien no inventó el estilo del nuevo vampiro, sí que le dio vida y lo supo calzar y proyectar. Es de mencionar, claro está, a la primera obra a color del género, que también sería la primera de Lee en el personaje: "The Horror of Drácula", 1958, y todas las demás que siguieron a manera de serie, por la productora "Hammer Films". Aquí en esta categoría yo renombraría a una excelente excepción, una obra de arte satírica, burlesca y de un extraordinario buen humor. Es la película de Roman Polanski: "The Fearless Vampire Killers” de 1967. También se le conoció como: “Dance of the Vampires or Pardon Me, But Your Teeth are in My Neck”.

3. Luego vendrían los memorables ochentas y su fascinación por el culto a la juventud, a la disco y a la música pop. Aquí ya no es ni el monstruo sobrenatural ni el aristócrata seductor, acá son las bandas, las “gangs” de vampiros o de caza vampiros, entre mezclados con bandas de motociclistas, estrellas del rock o personajes por el estilo. Grandes ejemplos y dignas obras de ver son: “The Hunger”, 1983, con David Bowie y Catherine Denueve; también ¡cómo no mencionar!, a “The Lost Boys”, con un extraordinario sondtrack.

4. Hay otra categoría que para mí, es aquella que busca centrarse en los libros, ser fiel a las historias originales y muy tratadas precisamente desde sus ambientes históricos. Muy al estilo de los libros de Anne Rice, recreando perfectamente bien sus ambientes. Ejemplos claros son precisamente la adaptación de su primera novela “Interview with the vampire”, 1994; y “Bram Stoker’s Drácula”, 1992, la extraordinaria obra de Francis Ford Coppola. En este cine, considero que el interés del cineasta es la historia, la narrativa sustentada en un sentimiento desarrollado a través de líneas de tiempo y espacio.

5. Debo mencionar también la categoría que quizás llamaría ‘Gore’, aquí el centro de interés es la matanza, la sangre, la violencia. Hereda mucho de los ochentas en cuanto a la cultura pop y el culto a la juventud. Algunas que mencionaría son por ejemplo: “From Dusk till Dawn”, 1996, de Robert Rodriguez y (¡como no podría ser!) Quentin Tarantino. Podría mencionar también a “Bordello of Blood”, 1996; y a “The Forsaken”, 2001.

6. Hay otra categoría que va más por la acción, la aventura y estilísticamente hablando, el “modo comic” de contar la historia. Hace buen uso de los efectos especiales, utiliza filtros que dan una impresión “muy azul” de la imagen y generalmente se nutren de historias y mitos antiguos con el uso de buenas peleas. Grandes ejemplos serían “Van Helsing” 2004, del extraordinario Stephen Sommers; “Underworld”, 2003 y 2006 con la bellísima Kate Beckinsale (también en Van Helsing), y la serie de “Blade”, 1998, 2002 y 2004, con Wesley Snipes.


7. Una categoría de películas menos conocidas, serían las que tienen como principal interés, la causa biológica y/o extraterrestre, del vampirismo. Aquí es un virus experimental o bien un injerto espacial, el gen del vampiro. Serían las más cercanas a una mezcla entre la ciencia ficción y el vampirismo. Por ejemplo “Lifeforce”, 1984; o bien “Rabid” de 1977.


8. Otra categoría sería la erótica. En ésta, los vampiros son extremadamente sensuales y la trama se basa mucho sobre el “leit motive” erótico y sexual, tanto por la historia como por el rol del personaje. Algunas dignas de disfrutar serían: “Vampyros Lesbos”, 1974; o bien “Innocent Blood”, 1992, que realmente no es “tan erótica”, pero tiene escenas realmente memorables.


9. Está también la categoría del “Anime” japonés, centrado en lo vampírico. Dignas obras serían: “Biohunter”, 1995; “Blood: the last vampire”, 2000; y personalmente la que más me gusta: “Vampire Hunter D”, 1985.

10. A mi parecer la última categoría de cine vampiresco está por realizarse o más bien, se está cocinando en estos tiempos. Su centro de enfoque es la situación de conflicto interno del vampiro entre su “ser” y el “deber ser”. Dos características de esta categoría: el vampiro tiene crisis de conciencia; y está enamorado o enamorada de una personal mortal. Aún no ha salido al cine, pero en la televisión ya se ha concebido, al igual que en la literatura norteamericana. Por ejemplo en “Buffy, la caza vampiros”, la cazadora se enamora de un otrora terrible vampiro que hoy en día tiene crisis de culpabilidad. En tiempos más recientes, también está la serie “Moonlight”, su personaje principal es un detective vampiro que sufre su ser, trata de negarlo y de huir de él, sobre todo porque se enamora perdidamente de una mortal humana. Luego están los libros de la serie “Twilight” (que ya he comentado aquí), de la norteamericana Sephenie Meyer, en donde también una mortal, en este caso adolescente, se enamora perdidamente de un vampiro que también posee crisis de identidad o de culpabilidad por lo que es. Es la adaptación al cine de este primer libro de la serie de Meyer, la que abrirá a mi parecer esta nueva “ola” de tratar al vampiro: con crisis de identidad, con culpabilidad y en una trama de drama por el amor imposible.

domingo, 31 de agosto de 2008

Los Muertos Bailan IV

Considero con vehemencia que Dead Can Dance alcanza su zenit musical con el disco "Aion", porque tiene de todo. Una exquisitez de sonidos diversos bien acoplados, ritmos de épocas renacentistas y medieval europeas, árabes, asiáticas y de lugares varios. La música que logran solo puede ser producto de una genialidad bien ilustrada y hasta podría decir que de una iluminación espiritual (que no religiosa).

Quizás tiene que ver con la madurez que ya alcanzaba la banda y especialmente sus dos miembros principales y estoy seguro que también ayudó mucho que uno de ellos, Brendan Perry, compró una histórica iglesia (Quivy Church) en el sur de Irlanda, en el campo, cuya nave central convirtió en un gran estudio de grabación. Desde allí, creo, lograron inspirarse para construir y grabar sus mejores piezas.

Con Aion remueven las arenas del pasado para sacar de él instrumentos y ritmos que siguen teniendo algo que decirnos. Aquí hay desde melodías renacentistas italianas como "Saltarello" hasta música tradicional catalana del medievo, bases musicales seculares y religiosas pero siempre con el toque especial de la banda y sobre todo de Brendan y de Lisa, que actualizan la música.

"Nosotros estamos buscando algo para descubrir el proceso de creatividad, de traer cosas inanimadas a las vida, de manera que éstas se expresen" (L. Gerard). Esta es "Saltarello".



La letra de esta pieza... habla por sí misma y demuestra también la interioridad y fuerza que le da B. Perry a las compisicones. Esta es "Black Sun".







Black Sun
Murder! Man on fire.
Murder! I've seen the eyes of the living dead.
It's the same old game. Survival.
The great mass play a waiting game.
Embalmed, crippled, dying in fear of pain, all sense of freedom gone.
Black sun in a white world.
Like having a black son in a white world.
I have a son, his name is Eden.
It's his birthright beyond estranged times.
Give me 69 years, another season in this hell.
It's all sex and death as far as eyes can tell.
Like Prometheus we are bound.
Chained to this rock of a brave new world.
Our god forsaken lot.
And I feel that's all we have ever needed to know until worlds end and the seas run cold
Give me 69 years, another season in this hell.
There is sex and death in mother natures plans

domingo, 24 de agosto de 2008

Los Muertos Bailan (III)


Desde que formaron la banda en Melbourne y se movieron a Londres, la integridad de Dead Can Dance se basaba en la fusión de sus talentos, de sus voces y también de su relación íntima. Al terminar ésta, físicamente se separaron Lisa y Brendan pero la creación resultó ser más poderosa y sobrevivió a la distancia, que no fue un distanciamiento espiritual, sino carnal.

Así crearon otras dos obras maestras de la música "
Whitin the Realm of a Dying Sun" y "The Serpet's Egg", cada más eclécticas, cada vez más fusionadas, abriendo puertas a otros artes incluso. En este tiempo colaboran con la película El Niño de la Luna de Augustin Villaronga, que participó como selección especial de España al festival internacional de Cannes. El director convenció a Lisa de participar haciendo su debut como actriz.

En este tiempo también compusieron música para un concierto en la Iglesia de St. Peter y crecieron musicalmente, saliendo de escenas más incisivas y entrando a una música más reflexiva.

Personalmente he de decir que escuchar estos discos.... es tomarse un día en el mar, sin sol, con brisa y sin gente. Y me atrevo a aconsejar a quien vea el video de "The Host of Seraphim" y no se conmueva al punto de sentir un vacío entre pecho y espalda, que mejor le es nacer de nuevo, porque algo de humanidad se le ha de haber perdido en el viaje empedrado.




Tributo aquí a la espléndida voz de Lisa y a la energía de Dead Can Dance, aprovechando algunas reflexiones con Lisa Gerard y Brendan Perry.

lunes, 18 de agosto de 2008

Los Muertos Bailan (II)


Los dos primeros discos "Dead can Dance" y "Spleen and Ideal" han sido considerados, básicamente, como los dos más representativos de su etapa gótica. Al menos tomando en cuenta que nacieron en esa escena y prácticamente la consolidaron debido al movimiento que despertaron en sus fans. Quizás no hicieron esto voluntariamente, pero a través de largos años aún persisten en el imaginario popular como parte del elenco arquitectónico del goth.

Las letras en estos dos discos varían en temas, pero sentimentalmente giran sobre la idea de principio-fin, atmósferas solitarias y amplias, situaciones de transcisión o espacios muy íntimos de traición y melancolía. Sobre Spleen and Ideal (el segundo álbum), Brendan Perry dice que éste hace alusión desde el mismo título, a lo que el poeta maldito francés Charles Baudelaire, se refería cuando mencionaba el dolor y la angustia del conflicto entre la carne pecaminosa y la lucha por conseguir el ideal.


Sobre la música, Perry mantuvo la idea que se usaban distintos marcos de música, desde lo oriental hasta lo barroco y medieval, pero que lo lírico y el contenido se lo daba la personalidad de cada uno de ellos a través de composiciones originales y letras introspectivas.
Desde este momento su música empieza a tener menos letras y más... música, tanto la voz de Perry y sobre todo la de Lisa, son empleadas como un instrumento más dentro de la obra sin que necesariamente "digan nada" en el sentido lingüístico de algún idioma, sino que más bien lo dicen desde su adhesión al resto de instrumentos, como esta canción llamada "Avatar" de su segundo disco.

lunes, 11 de agosto de 2008

Los muertos bailan


He querido con el mayor de los agrados, compartir con ustedes un verdadero esplendor para los sentidos por medio de varios posts que después de este, seguirán viniendo. Primero que nada, es música para acariciar los tímpanos, y también lo es para acurrucar la imaginación. Porque esta música es cinética, para lograrlo hay que cerrar los ojos.

Dead Can Dance es una de mis bandas favoritas de todos los tiempos. Es prácticamente imposible asignarle un sólo género musical, porque trasciende a todos y se convierte con su mayor sencillez en simplemente: música. En este primer álbum tradicionalmente se les incluyó dentro de un amplísimo género llamado "Goth", a donde va todo lo que suene a romántico-medieval-oscuro-vampírico-épico-fantástico. Las percusiones de este disco así como las nunca-suficientemente-alabadas-voces de Brendan Perry y Lisa Gerard hacen de éste, realmente, un hito de la humanidad en su conjunto universal.

Fue formada en Melbourne, Australia, allá por 1981. Se movieron a Londres y desde 1982 le dieron vida a la muerte con su primer álbum. Cuando les preguntaron ¿por qué el nombre de "Dead Can Dance"?, contestaron que "es lo que hacemos, como la máscara y quienes la hicieron, brindamos vida a lo inanimado, la madera cobra vida cuando se vuelve máscara y alguien la hace danzar, es una apología a la creatividad, a la creación, de lo inanimado a la vida, un instrumento es un objeto, algo inanimado, pero brinda música, brinda vida, de la muerte a la vida". Para mí es una perfecta emulación que el hombre hace de su dios, cuando éste es representado como dador de vida y creador. El hombre crea, transforma y da vida. Dead Can Dance.




miércoles, 6 de agosto de 2008

Flor de Blog


Agradecimientos profundos a russianblue y BuffeteLibre por otorgarle el presente premio a Xibalba-Wampyr, continuaremos en la lucha por ser parte de comunidades en las que vayamos compartiendo y construyendo conocimiento, como única salida a la indignidad que nos rodea. Quisiera ofrecerlo por mi parte, a otros blogs que me parecen muy interesantes y aliados en este camino de ir tirando luces sobre los túneles.


Como diría russianblue, no están obligados a aceptarlo. Pero yo sí a ofrecerlo porque los considero muy buenos.

domingo, 3 de agosto de 2008

Crónicas de la Guerra contra los Patojos: Claudina


Claudina salió de la fiesta dispuesta a irse ya a casa caminando. Era tarde y la noche del viernes estaba terminando. Había sido una semana cansada, como lo eran todas desde que se decidió a estudiar Derecho en la universidad, pero sus 19 años le daban energía para buscar lo que se proponía: ser una abogada defensora.

No sé de dónde le salió esa vocación, tal vez como a todos o a la mayoría, porque le impacientaba como mariposa en el estómago, contemplar la injusticia. Le gustaba la música y bailar, era alegre y muy bonita, con esas sonrisas coquetas pero inocentes que enamoran a cualquiera. Era como una niña cuando andaba abrazando y paseando sus muñecos de peluche, o cuando aún a su edad, se seguía emocionando con las imágenes de Snoopy. Se le podía ver en su cuarto tratando a sus Snoopies como si fuesen realmente amigos parlantes o tratarlos como bebés, claro, esto es algo que no le gustaba que todos supiesen.


En la U era lo que se dice "buena onda", algo platicadora y siempre sonriente, odiaba la clase primera de los miércoles, pero le hacía ganas, entraba y aunque hacía muecas cuando ingresaba el licenciado le ponía atención. Tenía novio, Pedro, la mamá de él fue la última en escuchar la voz de Claudina. Esa madrugada fatídica en que caminaba de regreso a su casa de la fiesta, le habló por teléfono entre la media noche y las 2 de la mañana, era perseguida, tenía miedo y la llamada terminó con gritos de ayuda.

A 4 kilómetros de donde fue la fiesta, amaneció el cuerpo de Claudina ultrajado y sin vida, tirado en la cuneta de una calle vacía con una sábana encima. Los bomberos llegaron, luego la policía, luego el Ministerio Público y por allí la prensa. Estaba vestida pero evidentemente desaliñada y con la ropa mal puesta, el pelo era una maraña de sudor y sangre, su rostro inanimado ahora, tenía las huellas de golpes: un hematoma en el ojo, sangre en la boca y en la nariz. Una bala en el cráneo le cegó la vida después, con certeza, de la tortura. Se dice que la llevaron en un carro blanco, "puro taxi", otros dicen que fue alguien conocido, alguien se asomó escondido a la puerta de su casa, oyó la agitación y luego el balazo, en seco. Avisó a los bomberos, o hasta fueron los mismos asesinos. Los policías le dijeron a los papás, cuando la andaban buscando en la madrugada, que "seguramente se fue con el traido", con certeza hubieran dicho después que fue un "crimen pasional", como les encanta dilucidar los casos. Ni si quiera se puede decir que nadie vio nada y nadie oyó nada, como es usual, porque nunca se hicieron las preguntas.

¿Quién o quiénes fueron? no importa, a las autoridades al menos, el caso estaba resuelto, veredicto: ella fue la culpable. ¿Y cómo fue eso?, claro, pues "
vestía sandalias y argolla en el ombligo y por eso el caso no merecía ser investigado" (así dijo una oficial), pruebas irrefutables de su identidad como prostituta o bien, marera (pandillera). Además, "cargaba una gargantilla y no andaba papeles". Es decir que la principal sospechosa del delito de secuestro, violación, tortura y asesinato... es la víctima. ¿Por qué? pues por cometer graves delitos como ser joven, ser mujer, ser bonita, andar sola, vivir la vida, reír y bailar... ¡Creer que se es ciudadana y ser humano con dignidad, en este país, en este mundo, es casi una osadía! Las autoridades han hecho todo lo que está en sus manos para demostrar que ella fue la culpable de su propio destino. No tomaron las huellas dactilares ni muestras de las uñas sino hasta en pleno funeral, en medio del dolor de sus familiares llegaron con amenazas y uso de la fuerza, abrieron el ataúd e hicieron las pruebas que "se les olvidó hacer en la morgue". No saben bien a qué hora se cegó su vida porque para el forense, en su informe, la autopsia se hizo horas "antes" de la muerte. El cadáver fue identificado desde las 5 de la mañana por sus padres pero el forense jamás anotó el nombre en sus reportes, para él siempre fue una "XX". No hay testigos porque no hay interrogatorios, no hay análisis de la escena del crimen, ni de los fluidos encontrados en la ropa, ni en el cuerpo. La prueba balística tiene las fechas incorrectas. No hay análisis del ángulo del disparo... en fin, un gran esfuerzo por argumentar la hipótesis verdadera: ella fue la culpable. Un logro más para la guerra contra los jóvenes.

(Hechos sucedidos en agosto de 2005 y aún investigados)

Tomado de "Guatemala: del Genocidio al Feminicidio", de Victoria Sanford.

Crónicas de la Guerra contra los Patojos

Guatemala es uno de los países con mayor índice de población juvenil en el mundo. También es uno de los que mayor índice tiene de mortalidad infantil, y además, de muertes violentas de jóvenes. Al escuchar, convivir y sufrir las historias de violencia que no por cotidianas, dejan de ser atroces e indignantes, uno llega fácil a la conclusión de que "es parte del fenómeno general de violencia".

Pero no, hay algo de erróneo en ello. No sólo es el número perdido dentro de un número más amplio y estadístico. Hay toda una amalgama de situaciones, de pensamientos, de imaginarios que sustentan y reflejan una especie de miedo-odio a la juventud, al "ser" joven. Fuera de ser un germen del futuro y transcendencia de la especie, pareciera ser vista e interpretada como el germen pero de la maldad, de la inocuidad o de la barbarie. Sus códigos parecen ser nunca correctos, sus manifestaciones identitarias atentan contra cualquier cosa, como sistema los usamos de excusa para el futuro pero en realidad los postergamos a la periferia y les castigamos por ello.

En Guatemala lo homicidios de personas de 5 a 30 años representan más del 60% de asesinatos en un país que "ostenta" un promedio de más de 5 mil muertes violentas al año. Además es en donde la víctima es la primera sospechosa a investigar por el delito de "provocación" o de "andar metida en algo". Estas crónicas llamadas "de la Guerra contra los Patojos", pretende contar algunas historias que tienen como hilos conductores la juventud, la violencia en su contra y sobre todo la indignación como fuente de lucha.

Parecieran fantasías, y ojalá lo fueran.

lunes, 14 de julio de 2008

Drácula Desencadenado

Hace unos siete años entré a una librería de tres pisos en Barcelona y después de mucho tiempo deambulando perdido, pregunté a uno de los dependientes de la tienda: ¿qué tenés sobre vampiros? Me llevó tres libros, uno de Anne Rice; uno sobre crónicas de viaje por Rumania: "Siguiendo la Ruta de Drácula"; y "Drácula Desencadenado" de Brian Aldiss.

Cuando vi la contraportada de éste último dije para mis adentros: ¿qué carajo hace un escritor de ciencia ficción metido en terror y fantasía?, aunque obviamente la combinación prometía algo interesante. Finalmente lo fue.

Drácula Desencadenado es un buen libro que presenta "ideas frescas" de un tema y un personaje altamente tratado, usado, formado y deformado cientos de miles de veces. Proporcionar ideas creativas en un tema que para muchos es ya agotado, tiene mucho mérito. Brian Aldiss ha escrito más de cien libros y casi todos relacionados a la Ciencia Ficción. Su trabajo quizás con más resonancia fue el guión que construyó junto a Kubrick sobre "Inteligencia Artificial", llevado a la pantalla después por Steven Spielberg.

Con la lógica que les caracteriza a los escritores de este género, Aldiss cuenta cómo un científico y empresario que trabaja con alta tecnología, de apellido Bondeland, logra construir un sistema revolucionario que "abre" cierto espacio dimensional sin lectura de tiempo, en el cual se puede insertar todo tipo de materia para conservarla y disponer de ella a libre antojo. Sus fines son comerciales: vender esos "espacios" dimensionales para ubicar allí depósitos de basura radioactiva y así no ensuciar más la órbita del planeta. Sin embargo como el gobierno y sus críticos se dan cuenta, lo que tiene en sus manos es lo más próximo a una máquina del tiempo de lo que jamás se haya logrado hasta ahora, aquí inician sus problemas. Paralelamente un paleontólogo patrocinado por el mismo Bondeland, hace el descubrimiento científico del siglo: un cuerpo o estructura ósea con dimensiones humanas que data de más de 25 millones de años.

Ambos hechos aparentemente inconexos son la parte de ciencia ficción del libro, lo que mágicamente les une después, es la parte fantástica. Ocurren apariciones fantasmales y fenómenos inexplicables que finalmente arrastran al protagonista a una aventura, podríamos decir neo gótica, que le lleva a través del tiempo al futuro posible y al pasado de la época victoriana. Conoce al mismísimo Bran Stocker y lucha con él.


La pregunta que propone la trama podría ser: ¿será posible que los vampiros no fuesen inmortales realmente, sino que viajasen por el tiempo a libre antojo?, eso explicaría, por ejemplo, por qué son vistos en una y otra época a lo largo de la historia.
La debilidad del libro no está en su trama ni en sus ideas, sino que en su narración (para mi punto de vista). Los primeros capítulos con cautivantes, pero a mitad de camino se va volviendo lento y extendiendo a la fuerza ideas ya claras. También pudo haber hecho una más interesante relación entre Stocker y Bondeland, debido a las personalidades que les brinda a cada quien, pero queda floja dicha mancuerna. Sin embargo y como dije al principio, sus ideas brindan un buen refresco al tema vampírico y "dracuniano", dándole un toque científico moderno al tema.

lunes, 30 de junio de 2008

Crónicas de Narnia: Príncipe Caspian (y 2)


Comenté en el post anterior sobre algunos antecedentes que me parecen interesantes del autor de estas Crónicas y de sus marcos de influencia. No es mi intención resumir el libro o la película, ya que estas obras se encuentran suficientemente expuestas en las vitrinas de todo el mundo y por toda clase de medios. Prefiero comentar ciertos aspectos que me parecen personalmente interesantes.

Como es ya común en la literatura fantástica -y no sé porqué pero sería un buen post- la obra de Lewis es un todo compuesto por varios eslabones, siete libros en total, que son siete aventuras distintas o por lo menos con cierta independencia una de la otra. Esta división se da porque Lewis así los escribió y publicó, uno tras otro. No como Tolkien y su "Señor de los Anillos" que es una obra completa, luego dividida editorialmente en tres. Por ello la obra de Tolkien no se puede leer en desorden.

Y ¿en qué orden se leen los siete libros de Narnia?, algunos dicen que en cualquiera, no importa. Otros dicen que hay dos formas de leerlas: en orden de edición o en orden "narniano". El primero corresponde al orden en que las escribió y publicó Lewis, el otro responde al hilo cronológico propio del mundo de Narnia. Estos serían las dos opciones:

Publication order Chronological order
The Lion, the Witch and the Wardrobe The Magician's Nephew
Prince Caspian The Lion, the Witch and the Wardrobe
The Voyage of the Dawn Treader The Horse and His Boy
The Silver Chair Prince Caspian
The Horse and His Boy The Voyage of the Dawn Treader
The Magician's Nephew The Silver Chair
The Last Battle The Last Battle

Yo los he leído y recomiendo lo mismo que recomendó Lewis en su momento, es decir leerlos desde su orden cronológico narniano. Tiene más sentido y uno se siente más imbuido en la atmósfera de ese mundo fantástico.

Esa no es la opinión del hijo adoptivo de Lewis, Douglas Gresham, quien ostenta los derechos de las Crónicas de Narnia y que además es el coproductor de las películas sobre ellas. Sus razones son que debe aprovecharse la edad y popularidad de los actores y actrices para mantener el interés del "gran público" y que ese orden facilita una corta lógica de aventuras, es decir, más fácil de consumir.

Otro detalle es la completa distorsión de la historia, en la original del libro, JAMÁS hay tal asalto al castillo de Miraz ni la cruel masacre del que es víctima la mitad del ejército de Caspian, por lo tanto tampoco sucede aquel "heroico" rescate del profesor y mentor del príncipe, ni mucho menos el cobarde y frustrado intento de asesinato al déspota que sí aparece en el filme. Todo es una invención sobre la invención original.

El hijo adoptivo de Lewis dice que fue a razón de brindarle más acción a la aventura, ya que -en sus propias palabras- la original del libro no se prestaba para hacer una "excitante película".

En fin, dos razones comerciales para tomar dos decisiones erróneas. A mi parecer, se manipula la voluntad y el gusto del "gran público" al siempre pretender pensar por él, desde una perspectiva de consumo y no de apreciación. Pero, quién dijo que apreciar da dinero. Nadie, creo.

Por último, el hijastro de Lewis, responsable de las adaptaciones, también dijo que era necesario colocarle las nuevas secuencias a la historia a manera de volverla más "épica" (¿¡?!). O sea gastar más en producción para introducirle más violencia, frustración y derrota, hará de la historia, una aventura más épica. ¿Qué entenderá por épico el hijastro?, no tengo ni idea.

domingo, 15 de junio de 2008

Crónicas de Narnia: Príncipe Caspian (1era parte)


Se acaba de estrenar la superproducción de Disney: Crónicas de Narnia, el Príncipe Caspian. A pesar de ser siempre motivo de alegría personal la realización y promoción cinematográfica de excelentes y clásicas obras de la literatura fantástica, sigue viviendo y carcomiendo en mí, la desilusión de las adaptaciones que se hacen desde las obras originales por parte de la gran industria del celuloide.

Unos breves antecedentes previos. Clive Staples Lewis, conocido también como C.S. Lewis o simplemente "Jack", fue un prolífico escritor británico que nació en Belfast, Irlanda del Norte, en 1898. Antes de ser un famoso escritor de obras para niños y de reflexiones cristianas, Lewis fue profesor de Historia y Literatura en Oxford. Allí conoció y se hizo amigo de J.R.R. Tolkien, con quien compartían gustos por las tradiciones, leyendas y mitos que, a la postre, los haría a ambos tan famosos como lo son hoy en día.

Lewis era un ateo convencido, mientras que Tolkien era católico. El poder evangelizador del segundo dominó finalmente y "sedujo" al primero al cristianismo. Pero lo hizo desde la versión protestante del mismo. Ambos, debido a sus inquietudes y gustos por la fantasía, iniciaron y formaron un grupo de novatos escritores llamado "Inklings", que era más bien un grupo de amigos y colegas que se juntaban en un 'pub' para beber algo, compartir lecturas y escritos sobre dichos temas. Allí nacieron dos mundos que hoy en día son clásicos en la fantasía mundial: La Tierra Media y Narnia.

Las diferencias teológicas que tenían los dos amigos se trasladaron a sus obras, ya que a Tolkien no le gustaba en absoluto la sobre carga de obvio simbolismo cristiano que Lewis depositó en sus Crónicas de Narnia. Y esa es, de hecho, y aunque a nadie le interese saberlo ni marque diferencia alguna, el reparo más severo que tengo yo personalmente con Narnia: es demasiada cristiandad la que fluye de su páginas. Lo tiene todo, resurrección, mesianismo, sacrificio propio por el pecado ajeno, el Gólgota, la crucifixión, etc. Sin embargo algunos autores que dan cuenta de tal situación, refieren que más allá de la carga cristiana en la obra de Lewis, lo que molestaba a Tolkien era su conversión al anglicanismo protestante y no al catolicismo, además que Lewis en sus escritos más analíticos y formales, despreciaba a los católicos llamándolos "Papistas".

Tiempo después, el creador de Narnia se alejó completamente al casarse con una viuda estadounidense de nombre Joy Gresham.
Pero como ya afirmé líneas arriba, lo remarcable de esta amistad y del grupo de 'Inklings' fue el nacimiento de dos mundos, dos universos más bien, que establecen parámetros y guías para toda la literatura fantástica. Además ambos han sido llevados a la pantalla grande en los últimos años, con diferentes resultados entre uno y otro, por supuesto. Pero de eso ya hablaremos en otro post.

lunes, 26 de mayo de 2008

El Inquisidor



El libro no llegó muy bien recomendado ya que venía con un sellito de "Best Seller" y porque me lo dio mi padre, no es que tenga nada en contra de él, es simplemente que aun creo verlo con algo del "síndrome Da Vinci". Ese que le ha dado a la gente por andar comprando compulsivamente todo tipo de literatura de la conspiración, de la dominación mundial, de las sociedades secretas confabuladas para conquistar al mundo y esas cosas.

El Inquisidor es, hasta donde sé, la primera novela del escritor argentino Patricio Sturlese. Cuenta la historia del "Ángel Negro", Angelo De Grasso, Gran Inquisidor General de Liguría y su persecución de dos libros malditos. Son algo parecido al "evangelio apócrifo del diablo", como ellos mismos le llaman y representan una amenaza al orden cristiano -y deista en general- establecido.

Uno de los libros que persigue De Grasso no es otro que el Necronomicón. Este libro, fuera de la ficción, es una obra que ha estado inmersa en el vaho del misterio por muchos años. Para algunos fue invención del gran escritor del terror H.P. Lovecraft. Para otros, realmente fue escrito por el "árabe loco" Abdul Al Hazred, allá por el 730 de nuestra era, dictado por "las voces y chirridos nocturnos de los Djinn, o demonios, en el desierto de Arabia".Y para los más especiales, fue escrito por puño y letra de Lucifer. Se ha dicho también que las páginas del Necronomicón eran de cuero humano. Todas las leyendas y lo que se puede decir acerca del Necronomicón da para muchísimos posts más.

Volviendo al "Inquisidor", la trama va hilvanando conocimientos y principios esotéricos y teológicos a la vez que descubre complots y traiciones. Utiliza como telón de fondo la pugna de poder en Roma entre las élites religiosas católicas, así como la crisis eclesiástica del Renacimiento. El nivel de detalle es muy bueno, describe casi a la perfección, por ejemplo, los métodos de tortura utilizados por el "Santo Oficio" . Es, además de un thriller sacro (como su autor le define), una novela histórica que mete sus narices en las intimidades de la curia, saca los trapitos sucios al sol con un aire de naturalidad.

Siento algunos vacíos en la historia, quizás es que no leí bien, el pie de bruja encontrado en las ropas del monje griego Xanthopoulos, por ejemplo, ¿de dónde salió finalmente?

Algunas partes de la trama central las sentí forzadas para justificar un final ya elaborado. Por ejemplo, el repentino ejercicio físico que hace el protagonista dentro del barco al pedir que le asignen tareas de marinero, con la clara y expresa motivación de darle antecedente narrativo a su fortaleza muscular que le servirá en la campaña de venganza contra el Cardenal Iuliano y sus huestes.

Hace uso de las repetidas fórmulas de estos thrillers: sociedades secretas en conflicto, relacionadas con la religión y/o fuerzas políticas. En este caso es una pugna entre la Santa Inquisición, con una especie de masonería católica llamada Corpus Carus y con una sociedad secreta de brujos llamada, no muy creativamente: La Sociedad Secreta de Brujos.

Además de una muy entretenida lectura, este mi contemporáneo escritor hace gala de sus conocimientos teológicos y critica sutilmente ciertas costumbres de comportamiento anormal, como el celibato. El libro ha traído de nuevo a mi mesa de trabajo viejos temas que estaban guardando lugar en la librera. Me refiero no sólo al Necronomicón, sino al árabe Alhazred, al apócrifo Enoch, a los bíblicos Nephilim, a Hermes Trimegisto, a los ocultistas como Crowley o Madame Blavatzy... etc. Ya vendrán otros posts, quizás.

La guinda al pastel de este libro fue el agradecimiento que el autor hace al extraordinario Chuck Schuldiner, gran músico estadounidense de la escena metalera.

martes, 13 de mayo de 2008

Días Extraños (II)

Hoy, me decidí y llamé a un amigo. Él es una autoridad en lo que se refiere a música clásica (académica, me corrige). Yo estaba en esos días en que simplemente queres aprender cosas nuevas, moverte un poco de tu "zona de comodidad". Le pedí rebanadas de enseñanza, quería ingerir un poco de Mozart. Pero no al estilo "10 grandes hits de Amadeus", sino a la manera de un "iniciado". Mi amigo no solo aceptó compartir su sabiduría con migo, sino además me invitó a su muy agradable y posmodernista apartamento de la zona 10. No solo eso, además me convidó a dos fantásticas cervezas alemanas (totalmente desconocidas para mi "gallera" trompa). Y no solo eso, además su muy hermosa compañera nos convidó a un fantástico canapé (¿?) de hongos, delicioso. Y no solo eso, el amigo me otorgó toda una cátedra sobre la música académica (ya aprendí) y anécdotas de los compositores, intérpretes y directores. Y no solo eso, además lo hizo con apoyo audiovisual por medio de un equipo francamente digno de un estudio de grabación profesional. Y no solo eso, gracias a él ahora soy menos ignorante, ya sé distinguir los conciertos, de las sonatas, de las sinfonías. Y no solo eso, además conocí a Mahler, realmente un tipazo compositor, ese será mi próximo objeto cultural de consumo (altruismo que le dicen).

Iba yo rebosante de finura delicadeza, cuando al salir me encuentro con que a mi carro le reventaron una ventana lateral reduciéndola a añicos vidriosos regados por el suelo. Con modesta resignación lo veo y... sonrío. Abro la puerta maltrecha y contemplo el desastre. Pérdidas dolorosas: 1.- Audífonos especiales para ipod con reducción de sonido externo; efecto inmediato: no podré apreciar apropiadamente a los nuevos maestros que ha adoptado mi melómana conciencia. 2.- Mi libreta de notas: para qué carajo les sirven mis apuntes, locuras, ideas, fantasías; efecto inmediato: amnesia creativa. 3.- Papeles de la oficina: por lo menos me quitaron trabajo qué hacer, solo falta que el cliente me entienda y me pague de todos modos (¡JA JA!); efecto inmediato: endeudamiento con la plástica tarjeta crediticia. 4.- Un taco de billar, esta pérdida me duele y mucho, dicho taco lo compré junto a otro igual que le regalé a mi tío, que es como un padre para mí, nos ha servido para juntarnos e ir a jugar un poco de pool; efecto inmediato: estoy lleno de fúrica ira.

Así que, más rápido de lo que pensé... hago a un lado mi sofisticada nueva fascinación por lo clásico académico musical y le regalo al bendito hermano que me robo mis pertenencias e hizo añicos mi puto día... con esta especial dedicación musical, no muy académica pero si bien sincera.

lunes, 12 de mayo de 2008

Por fin la lluvia


Como hace años declare a las religiones, instituciones non gratas en mi vida, me es fácil hoy en día ser más libre y más feliz, porque tengo menos sentimientos de culpa y creo en el ser humano como tal y no como figura hecha a la medida de la perfección, por lo tanto no me molesta la incertidumbre y espero cualquier cosa, porque el humano está lleno de errores. Y el mundo, al ser un imaginario del humano, también tiene errores. Así que a mí los mundos perfectos me desfilan a paso alemán redoblado por el arco del triunfo.

Ahora bien, hay cosas o más bien, ideas del mundo "perfecto" o "sacro" que me gustan. Entonces las tomo y las deformo a mi gusto y antojo, como cuando sos niño y jugás con la plasticina que te han regalado. Una de esas ideas que tomo de lo sagrado, es la del paraíso.


Cuando era niño tenía este amigo mío (aun somos amigos después de 25 años), cuya familia y él en su momento, practicaban la cristiandad desde una de sus sectas gringas: Testigos de Jehová. Para que lo dejaran salir a jugar futbol, cincos, trompo o lo que fuera que jugásemos, había que soportar cada día junto a él, una dosis de treinta minutos de "estudio". Así le llamaban a la evangelización obligatoria y aleccionadora de los nuevos cuadros.
Pues bien, ese no es el punto, el punto es que como acto de solidaridad yo me dispuse varias veces a compartir junto a él las lecciones de fe que nos impartía "una hermana" (pelo recogido, rostro pálido, largas faldas, poca imaginación, aliento a cebolla, parecería una señora mayor, solo sus barros nos daban cuenta que no era mucho más grande de edad que nosotros mismos, pero avejentada, el matrimonio con la iglesia y cristo ya le había cobrado el noble sacrificio de la juventud). La lección de fe incluía una oración de entrada, la lectura de la "Atalaya" (revista oficial de la secta) y la explicación bíblica (grandísimo sermón virulento) de cómo ser malo en esta vida, se traduciría en una interminable combustión de la carne y del espíritu en una eterna y desgarradora pira infernal. Bonita imagen para un niño.

Pero bueno, a lo que iba, el paraíso. Esa era la contraparte, el premio por ser obediente, entendido, sacrificado, llevadero, humilde, dar el diezmo, dar el trabajo, dar el tiempo, darlo todo por el todo para la otra vida. Para motivarnos a llevar este
camino de la verdad, la señorita avejentada nos mostraba una ilustración, un dibujo que nos parecía simplemente... excitante, ¡no!... más que eso: Extasiante. Si. Era un éxtasis (Estado del alma caracterizado por cierta unión mística con Dios mediante la contemplación y el amor, y por la suspensión del ejercicio de los sentidos). Era un valle verde, largo y profundo, al pie de montañas majestuosas, casi olía a limpio, a fresco, lo más impresionante era ver ese león, un felino de magna melena y recio abolengo, sentado a la diestra de un niño que le acariciaba impunemente su real cresta, y el león sin inmutarse siquiera.

Creo que nunca tomamos muy en serio, por honradez o por miedo,
la imagen del desgarro lacerado en las eternas llamas. Hoy en día mi paraíso es de color gris. Si. Nubes cargadas de agua. Lluvia interminable y constante que cambia su fuerza e intensidad, como compases de una buena pieza de rock, o una majestuosa sinfonía de Mozart. Una lluvia rítmica. Un ambiente algo frío, con viento suave pero marcando su presencia. No sé si un valle, una montaña, una playa o la terraza de mi casa. Ya no pienso tanto en el león sentado a mi diestra, pero si en un oso polar, mis nuevos animales favoritos. Pero mis osos se están ahogando por el deshielo y mi lluvia cada vez tarda más en llegar. Carajo. Y yo que no creo en el otro mundo, me tendré que inventar uno para conseguir mi paraíso. Si tan solo supiera escribir, haría un libro, inventaría un mundo.

domingo, 11 de mayo de 2008

Días Extraños

¿Nunca te has sentido como... deambulando en un día bizarro, extraño, incomprensible?
Como ir caminando en una calle aglomerada sin poder dar un paso por vos mismo sino que sos carroseado por mil almas desconocidas, vacías, autómatas, que te topan el hombro al caminar, te pegan la mano, te resoplan cerca de la nuca;
en un ambiente brillante, extremadamente claro, con luz radiante que ciega y rebota sobre un lecho de cal que está a tus pies y se explaya hasta la linea del horizonte y te rebota en la cara, sin consuelo arriba, sin consuelo abajo, ciego sin protección;
sintiendo una temperatura asfixiante, que no permite ni deja refugio, sin sombra en cual cubrirte, sin fuente de agua, con sed permanente, la garganta reseca, como tragando polvo con piedras, como si tuvieras carbonato con limón en el esófago;
sudando salado, pegajoso, del que se te pega a la ropa, que el vecino de la camioneta de deja en el antebrazo, sudor con olor, con hedor.


Un día extraño en donde tu mente ya no controla mucho;
Como sintiendo olas que revientan salvajes contra muros de piedra inquebrantable, rabiosa, violenta.

Imaginando ciegos que besan las manos y un sol que murmura poemas y de vez en cuando tararea una canción que además, odias.
Sintiendo una cruda infernal, insaciable, pero que no es una cruda de licor, sino del mundo, una cruda de personas, del ruido del tráfico, de las voces de los teléfonos.
Hartándote de la presencia de tu pareja, de la de tu madre, de la de tu familia, de la del chucho y hasta de la del zanate del poste de enfrente.

Con una repulsión que no te deja en paz ni a vos mismo.
Como un golpe de batería pesado, tosco, sin eco, plano, sórdido, sin vibración, un golpe de baqueta seco, directo, un sonido ahogado en sí mismo, en la caja de resonancia sin resonancia, casi sin vida, como que no existiera.
Un fondo de armonía digna de Escatología, estridente pero rítmica, el orden del caos al final del tonel de lámina en que estás metido y alguien golpea inclemente con un tubo de metal.

Como odio este clima de mierda. No me deprime ni la lluvia, ni el gris de la nubes, ni la soledad ni siquiera la tumba de mi abuela en un día de la madres. Me pone en estado letárgico, tóxico y embramado este puto calor del orto choncha de su madre, malparido pendejo hijo de la más recóndita...

Te da días en que nada sale bien,
no decís nada bueno,
no sabes qué querés hacer,
pierde tu equipo,
vos fallás un penalti,
el libro que leías lo dejaste en la oficina,
estás más coche,
no tenés amante,
o se fue con otro,
tu novia sí lo tiene,
y hoy es su día,
tu mamá... también,
solo pensás muladas,
no escribís ni mierda,
dejaste trabajo pendiente y mañana es lunes,
solo faltan ciegos de rodillas que te besen las manos,
rocas con caras de estupor esperando el fin...

The Cure me entiende, ahí te dejo la canción.



martes, 22 de abril de 2008

La Visita de Bienvenida (I)

Hace algunos años un amigo necesitaba vivienda y le ofrecí venir a mi casa. Él aceptó y le asigné el cuarto del fondo. No era muy grande pero suficiente para una cama, un mueble para guardar cosas y ante todo, un modesto baño privado.

El traslado lo hizo por partes, primero trajo los objetos comunes de adorno y entretención, luego la ropa y por último había dejado los libros, cuadernos y demás cosas que le servirían tanto a él como a mí, para la universidad.

El día previo a instalarse definitivamente en su nueva morada, fue cuando se percató por primera vez de que mi tío lo observaba de manera escrupulosa, como tratando de leer sus intenciones o verificando si en efecto era una buena persona u otro amigote más, aprovechado y vil, como los muchos que siempre tuve y él también.

Estubo con él durante todo el tiempo en que desempacó los libros y los colocó sobre el mueble solitario. También lo acompaño, según me aseguró días más tarde, a comer e incluso parece ser que decidió seguirlo hasta al supermercado. Pero lo realmente abrumador era que ya en su antigua casa, cuando se disponía a pasar su última noche con su tía, oyó que también había llegado hasta allí.

Por la noche, su última noche previa al traslado, mi tío llegó a su habitación y se le acercó a la cama para hacerle comprender que todo estaba bien, que había aprobado -de alguna manera- la prueba a la que, sin saberlo, lo había sometido. Era bienvenido en la casa y sobre todo, a ocupar el cuarto del fondo que durante tantísimo tiempo había sido el suyo, antes de caer enfermo y fallecer años atrás.

martes, 8 de abril de 2008

F.E.A.R.




Si con películas como "El Aro" o "Grudge" volviste a sentir un casi olvidado sentimiento de terror y suspenso como en aquellos thrillers de niñez en que brincaste del asiento y preferiste orinarte en las ropas, a caminar en soledad al sanitario; si te gusta las estética de los comics y el manga, sobre todo en su combinación de atmósferas frías y tecnológicas de laboratorios azules, con sonidos chillantes y movimientos rápidos y repentinos; si te gustaron desde un inicio los juegos de computadora o de cualquier consola en donde vos eras el protagonista de la historia, tipo Doom o el mismisimo Duke; y si sobre todo extrañas el estado de indefensión absoluta junto al de alarma constante.

Entonces también te va a gustar este juego. F.E.A.R. ha ganado cualquier cantidad de premios por su combinación de atributos tradicionales (y aburridamente similares) de los juegos de "primera persona" de acción, combinados con terror del suspense. La astmósfera de juego es siempre escalofriante y envolvente, pero la trama del juego es lo mejor, como para un libro, un cuento al menos. Bien dosificada a lo largo del desarrollo del juego mismo en donde te vas dando cuenta de quién es el verdadero enemigo y quién sos vos en realidad. Un laboratorio investigando y probando en humanos, combinaciones genéticas para super soldados (clásico posmoderno), se topa con una niña inusual que nadie sabe de donde vino, pero con el tiempo sale a luz que no es "normal", absorbe la energía negativa humana y la devuelve de alguna manera, peor. Se te aparece y desaparece, "juega" contigo, te sonríe por detrás de las esquinas, gatea hacía vos en los ductos del aire... y no la queres matar porque... también está indefensa... y no la podes matar porque el indefenso sos vos.

sábado, 15 de marzo de 2008

El Gran Laberinto


El libro de aventura algo fantástica del filósofo español Fernando Savater. Digo de aventura porque se trata de la misión tipo “quest” de unos adolescentes que viajan a través de portales mágicos a mundos literarios e históricos, en la búsqueda de letras-talismanes que liberarán a miles de personas, incluyendo sus padres, de una muerte metafísica inminente en las fauces de los Psicófagos, seres que destruyen las almas de los incautos que son prisioneros de sí mismos, del tedio y de la rutina (y del sistema).

Y digo algo fantástica refiriéndome a las características propias del género. No hace uso de magos, hechiceros, dragones u otros seres propios de la imaginería de esta literatura, o bien, hace un uso mesurado de tales figuras. Más bien lo fantástico recae en la trama misma y en la interacción de personajes reales históricos (como Diderot), con seres literarios (como el Quijote) y con criaturas fantásticas (como Frankenstein).

Lo que me gustó:

  • Se nota el oficio de escritor de este filósofo vasco, la narración es clara y directa, sin complicaciones y con una verticalidad veloz que favorece la aventura. Lo logré leer en una tarde con la mitad de su noche.
  • La idea de rendir homenaje por medio de una obra propia a sus influencias tanto históricas como literarias, no es muy original pero ciertamente si está bien lograda. A uno le dan ganas de volver a leer esas historias o bien de conocer a los que no ha leído.
  • Algunas escenas son memorables, para mí personalmente, porque me identifico con los mismos personajes e influencias, sobre todo tres:
1. cuando viajan a la Francia de la Ilustración y se involucran en la secreta construcción de la Encyclopedie de Diderot y D’Alembert. Un casi sueño húmedo que comparto.

2. cuando viajan a la Inglaterra victoriana y conviven en una fiesta majestuosa propia de la época, con Óscar Wilde y Sherlok Holmes (no Sir Arthur C.D.), ¿a quién no metería yo en esa misma fiesta de la época: Byron, Stocker, Shelly, Polidori, Jack… Jeckyll?

3. cuando viajan a la ciudad fantasía por excelencia: Praga y más aún, se relaciona al mismísimo Golem en su forma de Frankenstein y al filósofo checo Jan Patocka. Hasta comparten prisión, como sucedió en realidad con éste pensador y también al protagonista de la historia de Gustave Meyrink.

Lo que no me gustó:
  • Pensé, por prejuicio quizás, que iba a encontrar una historia más complicada, con más reto. Al venir de un filósofo y llamarse “laberinto” lo creí así.
  • Me gusta el estilo de varias historias hilvanadas por una general (como “Vikram y el Vampiro”) pero en este libro son mejores los eslabones que la cadena en sí.
  • Comprendo el énfasis entorno a la regidora idea de la libertad, pero no la ausencia de la crítica. Quizás me prejuicia la idea que tengo del autor al lado de otros como Mario Vargas Llosa.

Algunas cosas interesantes:

Savater realizó esta obra con varias influencias: sus raíces filosóficas, sus personajes literarios y… su afición por los juegos de roles.

martes, 4 de marzo de 2008

Ride the Lighting

Con esta increíble canción cerramos ya tanta palabrería sobre el circo de muerte que siguen pidiendo mis conciudadanos como si no tuviéramos suficiente. Tanta realidad me hace sentir como un cura medieval ante un globo terráqueo hecho por Galilelo. Así que lo mejor será continuar con el verdadero propósito de este blog y hablar sobre libros, audiovisuales, cine, música... que pertenezca al mejor mundo de la fantasía, que aunque tenga horror y terror, sigue siendo un mundo imaginado.



Guilty as charged
But damn it, it ain't right
There's someone else controlling me
Death in the air
Strapped in the electric chair
This can't be happening to me

Who made you god to say
"I'll take your life from you!!"

Flash before my eyes
Now it's time to die
Burning in my brain
I can feel the flame

Wait for the sign
To flick the switch of death
It's the beginning of the end
Sweat chilling cold
As I watch death unfold
Consiousness is my only friend
My fingers grip with fear
What am I doing here?

Flash before my eyes
Now it's time to die
Burning in my brain
I can feel the flame

Someone help me
Oh please God help me
They are trying to take it all away
I don't want to die


Time moving slow
The minutes seem like hours
The final curtain all I see
How true is this?
Just get it over with
If this is true, just let it be
Wakened by horrid scream
Freed from this frightening dream

Flash before my eyes
Now it's time to die
Burning in my brain
I can feel the flame

sábado, 1 de marzo de 2008

¿Rousseau o Camus?



J.J. Rousseau describía en su obra el “Contrato Social”: Todo malhechor, atacando el derecho social, conviértese en rebelde y traidor a la patria (...) La conservación del Estado es entonces incompatible con la suya; es preciso que uno de los dos perezca.







A
lbert Camus señaló: para que existiera un equivalente, la pena de muerte debería castigar a un criminal que hubiera avisado a su víctima de la fecha en la que le provocaría una muerte horrible y desde ese momento, la hubiera mantenido confinada durante meses a su merced. Un monstruo así no se encuentra en la vida real. (Extraído de Revista D, 15 de enero 2006)

lunes, 25 de febrero de 2008

Un nuevo espectáculo que ¡está de muerte!

En este circo que es mi país, los payasos causan lágrimas y los enanos son niños abandonados;
Las bestias son hombres y sus entrenadores usan traje o guerrera;
Las bailarinas son apedreadas por parecer travestis y vendemos zapatos de mujer con fotos de muertas;
El gigante está escondido y el malabarista pidió plaza en las calles;
Pero para el invitado persistente, que es la muerte;
Le tenemos una pena, que es una alegría y una suerte de limpieza;
No es la silla ni tampoco la cuerda;
Es la humana jeringa.

Los siguientes posts están dedicados a la humanidad del hombre, que ve en la muerte no una pena, sino el final de las penas. Empezamos con estos versos del gran Machado.

Recuerdos de sueño, fiebre y duermevela (IV) (Los complementarios) -Extracto-


¡Tan-tan! ¿Quién llama, di?

--¿Se ahorca a un inocente
en esta casa?

-Aquí
se ahorca, simplemente.
----------------------------------
¡Qué vozarrón? Remacha
el clavo en la madera.

Con esta fiebre... ¡Chito!
Ya hay público a la puerta.

La solución más linda
del último problema.

Vayan pasando, pasen;
que nadie quede fuera.


domingo, 17 de febrero de 2008

Para mis cristianos conciudadanos


Esta es la postura más idónea, por no decir "cómoda", para un momento trascendental en la vida de alguien: su muerte.

Se relaja el cuerpo recostándolo sobre una camilla con acolchonada superficie, los pies lo suficientemente separados como para mejorar la circulación sanguínea y dos elementos especiales más: los brazos extendidos en los costados y la cara viendo al cielo, porque al cielo irá según mis conciudadanos cristianos, a ser juzgado por sus actos, porque aquí en la tierra de Adan ya deliberamos el traspaso de jurisdicción, hicimos lo que nos corresponde como hijos de Dios hechos a su imagen y semejanza, condenamos el cuerpo, ahora le toca a él condenar su alma. La mitad del trámite ya está sellada.

Falta un elemento a remarcar, este momento importante de su vida, su muerte, no lo pasa ni solo ni mucho menos desapercibido. Todo el mundo se entera, si no ¿cuál es la gracia de la pena? Ya que dicen mis conciudadanos cristianos, hermano me dicen, que es una "medida que disuadirá a otros (¿hermanos también?) a no cometer más delitos tan degradantes y deplorables como lo es el asesinato, es decir quitarle la vida a otro". Mis hermanos cristianos entienden, debo suponer, que entonces existe un asesinato bueno y uno malo.

El malo sería el que hace, por lógica, la gente mala. Los delincuentes, los violentos, los inescrupulosos, los que por dinero vendieron la muerte o la dieron en abonos, como en un secuestro. ¿Y el asesinato bueno? imagino que será el de la ley, el que por mandato arrebata la vida.

Supongo entonces, en mi judeo-cristiana y deuteronómica ignorancia, que a aquella zarza ardiente -"Soy el que Soy" o Dios que le nombran- de aquel monte -Sinaí que le dicen- de aquel país del norte africano -Egipto que le llaman-, le faltó dar la versión completa del quinto mandamiento "NO MATARAS", quizás por falta de tiempo o de combustión, pero ahora la revelación se hace y abro los ojos y entiendo, la versión completa realmente decía:

No Matarás... a no ser porque la ley lo mande, o que el presidente no quiera indultar.

Ese es entonces el Asesinato bueno, el de la gente buena, la gente inteligente, civilizada, respetuosa de la ley y las buenas costumbres. Cristianos en su bendecida mayoría.

Las nubes de la confusión y la duda, de pecador, aun me atormentan pensando: los malos son los delincuentes, los homicidas, los ladrones, los que a través de la acción violenta, predeterminada y alevosa, hacen daño a alguien. El más malo de los malos es el que le hace daño al bien más preciado, la vida. Y los buenos somos los que no lo hacemos, los que respetamos a los demás como a nosotros mismos, porque todos somos imagen y semejanza del Señor. Y entonces qué pasa cuando las personas buenas matamos, ¿es entonces un acto bueno? Alguien me dice, si matan a tu hermano, madre, hijo, etc., seguramente matarás al victimario. ¿Me convierto entonces en malo? No, si tengo justificación entonces mi acto malo se vuelve bueno (¿¿??), o sigue siendo el acto malo, pero yo sigo siendo bueno. ¿Es bueno mi acto malo porque tengo justificación de hacerlo?

He dicho antes lo difícil que se me hace meterme en la mente de un suicida o suicidado. ¿Y en la de un condenado? Si al primero le respeto su decisión personal sobre qué hacer con su vida, o con su muerte. Mis cristianos conciudadanos me han dicho que no es argumento, porque la vida no le pertence, sino a su creador. ¡Hijole! ¿Y entonces qué pasa con el condenado, si ya decidieron por él?

No es irónico que la posición de muerte, sea como la de la crucifixión.

En esa mi apocalíptica ignorancia y mala memoria no recuerdo bien, ¿el cristiano es el que está en la cruz o el que le envió a ella?

sábado, 2 de febrero de 2008

Death of an Angel




Death of an angel so beautiful to me
Shattered pieces fall to earth - Time can never heal

The story is over now, all points have been made
But when you hold out your hand I don’t see a thing

You can reach for the stars, but take what you get here

Was last December and all was milky white
Came December again and all is black
With hands to our mouths, we need food to live
But it’s poison’s nature to kill if we choose to swallow

You can reach for the stars, but take what you get here

So far
So far, so deep
So deep it burns
I burn until I cry
I cry
I die

domingo, 27 de enero de 2008

Una Hoguera Fúnebre (in memoriam Gaby N.)


En la antigüedad, los vikingos honraban a sus héroes muertos en batalla, mediante una pira y una embarcación, para su viaje al Valhalla.

La muerte es una constante en mi vida, como en la de cualquier otro. Mucho se ha dicho y se dirá sobre ella porque es parte irrevocable de vivir. Pero ahora bien, así como la vida no es existencia per se, tampoco la muerte es su seudónimo. Dejar de vivir, es decir, morir, no significa necesariamente dejar de existir. Hay personas que viven toda su vida sin existir y, como en el caso de mi amiga, hay las otras que mueren pero siguen existiendo. No voy a decir que “en nuestros corazones” o en “nuestra memoria”, porque además de ser común también es obvio. Su trascendencia que la hace seguir existiendo, es el aporte que deja en la tierra de los (medio) vivos.

Sus escritos, sus comentarios, sus recomendaciones, sus charlas, sus grupos de lectura… fueron y son los vehículos de la inspiración que en todo momento emanó y compartió con quienes la conocemos, no era cuestión de trabajo, era algo natural, era compartir algo que amaba: los libros, las historias, las letras. En común teníamos la fantasía, los mundos imaginados, las leyes inventadas, los universos paralelos, los viajes aventureros de épica y honor, los personajes bizarros, las historias complicadas y sin fin.

El rincón aquel de la librería donde regularmente nos topábamos sigue siendo un logro de ella, la esquina de la literatura fantástica, en medio de océanos y verdades lógicas, análisis de la realidad y ficciones verosímiles, había la ficción por excelencia que tanto nos gusta y tanto comentábamos. Nos reuníamos en esa esquina a platicar tanto con Frodo, como con Lestat, con Merlín, con los celtas, con los duendes, con los elfos, con Lewis y hasta con Potter. Hoy la esquina esa ya es un poquito más grande, ya tiene un cuarto de mesa-mostrador también.

Hace días, horas quizás, murió esa amiga mía. No hablábamos mucho, no nos frecuentábamos, creo que no teníamos nuestros números de teléfono ni sabíamos a ciencia cierta en dónde vivíamos. Pero cómo la extraño ahora que ya sé. Compartíamos un rincón de fantasía e imaginación, de libros y de charla, nos compartimos escritos y referencias, críticas y opiniones, gustos y preferencias. Eso nos contó más de nuestras vidas y personalidades que años de conocernos. Para mí, sigue existiendo.

martes, 15 de enero de 2008

Vikram y el Vampiro


Esta es la historia de cómo un Baital, que cuelga de un árbol por la argucia traicionera de un brujo, pone a prueba la paciencia, humildad y sabiduría de un Rajá. No cualquiera, del más legendario de los reyes antiguos de la India, Vikram "el Valiente".

El libro es una recopilación de once cuentos que un orientalista aventurero inglés, Richard Burton, tradujo a su propio idioma y que luego su esposa publicó en 1870, es decir 51 años después de la primera obra literaria sobre un vampiro (Polidori, 1819) y apenas 27 antes que la gran obra de Stocker viera la luz (Drácula, 1897). En el original habían catorce historias más bajo el título "Veinticinco cuentos de un Baital", el señor Burton escogió las que le parecieron más interesantes y le cambió el título. Ignoro realmente cómo llegó a la traducción o comprensión de que un vampiro era un Baital, pero es lógico pensar que bajo el ideario de su cultura y de su tiempo, lo más parecido a aquella figura sobrenatural era un vampiro. Recordemos que en esas épocas no regulaba aún la idea estilizada del aristócrata seductor, más bien eran seres demoníacos, fantasmales y mágicos. De cualquier manera el libro nos recrea un mundo de mutua convivencia entre lo sobrenatural y la vida cotidiana del ser humano, con tal prontitud que uno no se atreve a cuestionar la verdad en las historias.

Desconcierta y hace vertiginosa la lectura, el propio Baital, con su falta de elegancia visual (un murciélago alargado y parlante que cuelga de pies en la rama de un árbol), compensada por una profunda sabiduría y agudeza intelectual, sarcástica, burlona, irreverente y hasta redentora (tanto para él como para el Rajá Vikram). Se constituye como la consciencia crítica y oscura del gran rey, afirma lo que el Rajá no se permite ni pensar, tienta sus bajos instintos, se mofa de su moral y de sus "gemas del saber", recibe sus castigos como muestra de logro al exasperarle, le enseña humildad, obediencia y silencio. Todo con una sutileza exquisita. El Baital es un nato narrador, un cae bien con inteligencia, un desvergonzado honesto, es el niño feo y travieso que por su encanto gana los corazones. Y lo sabe, y lo goza.

Las historias que cuenta están hilvanadas por una que las une a todas, al estilo de "Las Mil y Una Noches", son como perlas unidas por un sólo cordel, en palabras del propio autor. A saber: Un brujo con sed de venganza contra el Rajá, arguye un plan simple pero siniestro que finalmente une los destinos del vampiro y del rey, junto a su hijo que le acompaña. Contrario a lo que espera el yogui (brujo), esta infame relación entre sus víctimas resulta ser su propia destrucción, dándonos a nosotros en el ínterin de su misión, un agradable agasajo de magia, intriga, historias de amor y traición, honor, lealtad y sarcasmo moral.